Lista de las 10 peores películas de 2015 (de peor a menos mala)

En este artículo llevaré a cabo la lista de las 10 peores películas del año (2015) según mi criterio, las películas estarán ordenadas de peor a mejor. No tengo ni que decir que no recomiendo ni a los masoquistas visionar estas películas y que cada uno debe hacerse responsable de las consecuencias si decide finalmente hacerlo.

1) Obsesión.

Rob Cohen toca fondo con esta porquería. Mala, absurda, risible, previsible y cualquier adjetivo negativo que se os ocurra. No es más que una copia cutre de cualquier telefilme de Antena 3. Lo único que la diferencia es Jennifer Lopez, lo cual resta, no suma. No hay ni un minuto aceptable en esta cosa y aún encima no es de esas películas malas con las que te ríes, es de las que te ponen de un constante mal humor. Si algún familiar, amigo o mismamente tu pareja te intenta llevar a ver esta película alegando cosas como “hay que ver de todo” o “no puede ser tan mala”, ni caso, te merece más la pena cortar vuestra relación.

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2) Toc Toc.

Eli Roth ha concebido la película más estúpida del año cinematográfico. Un sexualizado "explotation film" que no va a ninguna parte y en el camino provoca nauseas. El Roth de siempre, cien veces peor que nunca.

3) Point Break.

En el climax de los remakes innecesarios está el de "Le llaman Bodhi". El único acierto de esta película es mantener el excelente título original que fue traducido en la de Bigelow. No se parece en nada a la original, las escenas de acción son lamentables, el reparto en general también, visualmente es un cúmulo de horribles filtros de CC Looks y el guión ofrece diálogos tontos y personajes planos carentes de carisma. Si en la original sólo me interesaban las escenas de acción, los paisajes y el rollito hippie de Swayze; aquí la publicidad a Gatorade.

4) Ocho Apellidos Catalanes.

El cine español se ha quedado -por poco- a las puertas de entrar a mi lista de 10 mejores del año. Desgraciadamente ha entrado bien arriba en la de peores. La secuela de aquella sobrevalorada comedia con el título "A Spanish Affair" en algunos países, mantiene los fallos de la primera y estropea sus aciertos con rotunda efectividad. Un producto hecho aprisa y corriendo que no consigue ni sacarme la sonrisa. Tediosa.

5) Love.

Gaspar Noé regresa en su intento de ser el más guay y transgresor del séptimo arte. Lo hace con un rollo irritante, pretencioso, de filosofía vacua y falsaria, carente de erotismo, actores, personajes, emociones, historia o mensaje. Pedante unidimensionalidad en 3D. La diferencia entre ver porno y "Love" de Gaspar Noé sólo la entienden los hipsters gafapastas. Aunque el porno es más erótico, eso sí.

6) Superpoli en Las Vegas.

Kevin James regresa como Paul Blart, el guardia de seguridad/gordito entrañable de una película que fue más entretenida y menos mala de lo que esperábamos muchos. Ya se encarga su secuela de arreglarlo. Su humor es tan tonto y poco inspirado que casi ofende, y lo peor de todo, no hace gracia. Ni un poco.

7) Pay The Ghost.

Una película de Halloween para echarse a dormir. Nicolas Cage sigue enterrando lo que pudo ser y por momentos fue una carrera ejemplar. Tópica, absurda, irrisoria, mal realizada, escrita e interpretada. No hay truco ni trato.

8) El viaje más largo.

La gente guapa hace cosas buenas y entonces le ocurren cosas aún mejores y todos son felices en este meloso e infumable melodrama romántico de la prodigiosa mente de Nicholas Sparks. Nada artifical...

9) Hitman: Agente 47.

Otro insulto a los videojuegos, a la verosimilitud, a la inteligencia del espectador y a los blockbusters como vehículo de entretenimiento. Un desastre de proporciones épicas.

10) 50 sombras de Grey.

Un coñazo de categoría que no encuentra su lugar. No le van los adjetivos transgresora, provocativa, sensual ni erótica; es básicamente una descafeinada y pretenciosa chorrada para niñas analfabetas. Eso sí, duele que una buena directora y su elegante trabajo se desperdicien para semejante chorrada. Al igual que me duele que esté metida en esto Dakota Johnson y que Danny Elfman definiera la película como el inicio de un nuevo género. Cuidado con este peligroso método de tortura.

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Alejandro Arranz