Aquí estamos. Ha pasado todo un año de cine para plantarnos a menos de una semana de esa ceremonia de premios de la que todo el mundo habla. Un acontecimiento que por su desmesurada difusión merece ser comentado año tras año, en directo, hasta las tantas de la madrugada. Me refiero, por supuesto, a los Oscar. Como cada año hemos dejado atrás una interminable lista de festivales (Toronto, Sitges, Berlín, Venecia, etc), galardones de Asociaciones (de críticos, actores, directores, guionistas, productores, etc), premios que son fuente de conjeturas de cara a los propios Oscar (“Globos de Oro”, “Bafta”, "César") e incluso a nuestros apreciados Goya. Todo para alcanzar esta cita anual con el cine, o con lo que sea que se celebra ahora en los Oscar. Perdonen la ironía, hablamos de la conclusión de la temporada de premios, del sprint final, y hay que aplaudir con sinceridad a éstos premios casi centenarios otorgados por la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas en reconocimiento de los profesionales de la industria cinematográfica.
miércoles, 28 de febrero de 2018
Los Oscar (90ª Edición)
lunes, 26 de febrero de 2018
Crítica de "Yo, Tonya"
-Una de las apuestas más osadas y refrescantes del 2017. Un inesperado triunfo.
-La interpretación de Margot Robbie cumple todos los requisitos para el Oscar, y además es magnífica.
Las carreras del director Craig Gillespie y el guionista Steven Rogers no me habían llamado apenas la atención hasta ahora. Pero este año se han sacado de la manga esta especie de furibundo biopic en el que se mezclan todo tipo de géneros y películas, desde la comedia criminal de los Coen y el melodrama familiar hasta una suerte de radiografía de dos américas. Juntos han conseguido una película tan chiflada y scorsesiana en el exterior como arriesgada e inaudita en el interior. Una comedia negra en la que cada golpe nos divierte y cada risa nos golpea, creando un hematoma de dolorosas reflexiones inteligentes pero no especialmente sutiles. La sutileza está para romperla a martillazos en la tragedia americana más graciosa del año.
domingo, 25 de febrero de 2018
Crítica de "Todo el dinero del mundo"
-Afilada parábola sobre el capitalismo y la avaricia. Plummer es capaz de ser abominable pero magnético.
-La frialdad juega a favor de la historia, no así la falta de fiereza de un Scott tan profesional como insuficiente.
Es triste que el nuevo filme de Ridley Scott vaya a ser recordado por el escándalo de Kevin Spacey en relación a las acusaciones de acoso y abuso sexual. Ni yo mismo quería empezar estas líneas recordándolo, pero entre la prensa amarillista y un artículo de cine, queda espacio para una sucinta mención. Lo grande del asunto es que tras sustituir a Spacey por Christopher Plummer, el señor Scott rodó de nuevo todo el material relacionado con el personaje en nueve días, una cifra increíble al alcance de muy pocos. Sea como fuere la cinta ya se ha estrenado en la cartelera, y con ella Scott quiere narrarnos el secuestro verídico de John Paul Getty III y los desesperados esfuerzos de su madre por conseguir que el abuelo del joven, el magnate del petróleo John Paul Getty Sr., pagase el rescate. Es 1973, paseamos por las calzadas de la bella nocturnidad italiana, en blanco y negro.
sábado, 24 de febrero de 2018
Crítica de "Lady Bird"
-Gerwig logra que parezca como si nunca hubieramos visto nada como ésto, el detalle gana con creces a la generalidad.
-Uno de los mejores repartos del año. Ronan y Metcalf no pueden estar mejor.
Greta Gerwig tiene una brillante carrera como actriz y guionista, pero seguramente muchos tenían curiosidad por saber si todo el talento que muestra en ambas facetas, se podría extrapolar a la dirección, ofreciendo esa voz singular y moderna que siempre le ha hecho destacar. En 2008 ya probó suerte, junto a Joe Swanberg (Win It All), en la dirección de Nights and Weekends, perteneciente al movimiento “mumblecore”, al que tanto han aportado Gerwig como Swanberg. En esta ocasión Gerwig realiza su ópera prima en solitario y como no podría ser de otra forma se trata de una comedia dramática independiente. La guionista y directora nos narra el crucial tránsito del instituto a la universidad de una joven que busca encajar en su medioambiente social al tiempo que quiere cambiar de aires e irse a estudiar a la costa Este, un plan que se complica debido a la situación económica de la familia y al conflicto resultante con su sobreprotectora madre. Les presento a Lady Bird, vive en el lado incorrecto de las vías de tren.
martes, 20 de febrero de 2018
Crítica de “La forma del agua”
-De un buen hechizo nunca se es consciente hasta que termina. Bravo señor director.
-No es la mejor película del año, pero sí una de las más bellas.
Si hay una película que ha cautivado a todo el mundo en 2017 esa ha sido la nueva obra de Guillermo del Toro. Los propios y los extraños han caído bajo el hechizo de su nuevo cuento de hadas, y en la carrera de premios ha conquistado cada gala y cada festival en su camino hacia los Oscar. Recordemos que este último trabajo del cineasta mexicano ha entrado en el selecto grupo de películas con 13 nominaciones a los premios de la Academia, y todo parece indicar que se llevará a casa un buen puñado de caballeros dorados. Sin duda el motivo de tanto revuelo es que Del Toro ha creado otro fascinante mundo de fantasía en el que se mezcla lo poético con lo político, enamorándonos al tiempo que nos hace reflexionar sobre el respeto, la auténtica belleza y el amor como núcleo vital capaz de derribar cualquier muro. Claro, se hace difícil resistir el embrujo.
lunes, 19 de febrero de 2018
Crítica de "The Florida Project"
-Una de las mejores películas y uno de los mejores finales del 2017.
-Sean Baker y Willem Dafoe, dos de las miradas más tiernas de la temporada. Cada uno en su campo.
Cada cineasta tiene su propia forma de narrar, de introducirnos en los mundos a los que da forma y apegar la ficción a nuestra realidad a través de los mecanismos narrativos. Sean Baker tiene una mirada única, capaz de mostrarnos toda la crudeza del mundo real desde un prisma mágico y vivaz (en ocasiones estrafalario) e incluso de definir un espacio o a un personaje con apenas un pequeño trazo tan preciso como delicado. En esta ocasión el espacio es un pequeño motel de mala muerte cercano a Disney World, y los personajes un grupo de almas perdidas tan imperfectas como humanas. Ésto le sirve a Baker para estructurar una poderosa metáfora social de aún más importante autenticidad emocional, una tragedia narrada con la ilusión y el colorido de una infancia a punto de truncarse, ajena a los problemas de la difícil realidad adulta, que la rodean y se van intensificando. The Florida Project tiene la virtud de ser el filme más imperfectamente real y humano que ha dado el 2017, un conmovedor milagro.
sábado, 17 de febrero de 2018
Crítica de "Black Panther"
-Coogler realiza una película con identidad propia, que prioriza el contenido por encima de la evasión.
-La trama es floja y al filme le falta un mayor equilibrio entre seriedad y carisma.
Es la película de Disney-Marvel que más me ha dividido, y es casi la otra cara de la moneda de lo que fue Thor Ragnarok. Si aquella era un torrente de diversión alucinante sin apenas relevancia en el MCU, este debut marvelita de Ryan Coogler es sin duda algo trascendente dentro del canon. Una película de ideas en ebullición, que se esfuerza por convertir su espacio, Wakanda, en un lugar apegado a la realidad, y con una sociedad que piensa y siente, con tradiciones y con una evolución generacional compleja. Por supuesto lo más importante de ésto es que no hay otra producción de semejante tamaño que presente una alegoría social y racial tan bien formulada, que dé espacio a la diversidad de opiniones y ofrezca además un elenco de personajes femeninos inteligentes, poderosos y con motivaciones reales. Llámenlo condescendencia si quieren, pero se parece más al tipo de película que necesitamos aunque muchos cínicos no la quieran. Qué pena que además de ser el contrario del filme de Waititi en cuanto a relevancia también lo sea en cuanto a diversión. Black Panther es una de las películas menos entretenidas del reciente MCU.
miércoles, 14 de febrero de 2018
Crítica de “El hilo invisible”
-No creo que haya nada semejante en todo el cine de 2017.
-Si Day-Lewis se retira con ésto, puede irse en paz. Se merece su cuarto Oscar.
A estas alturas no cabe la menor duda de que Paul Thomas Anderson es uno de los mejores y más personales cineastas de la actualidad. La evolución de su filmografía es orgánica, fascinante e intachable. Con su última obra me ha vuelto a trastocar, y me he convertido de repente en un personaje contradictorio. Hacía tiempo que no tenía tantas ganas de hablar largo y tendido sobre una película, de destripar cada fibra de su ser, y al mismo tiempo una conciencia tan clara de que hacerlo sería despreciable. Eso convierte las líneas siguientes en un trabajo harto complejo de realizar. Pero no se alarmen, a pesar de las barreras deontológicas intentaré que cada palabra y cada espacio sean significativos, como Woodcock al concebir cada hilo de sus vestidos o Thomas Anderson al disponer cada material de su espléndida película.
sábado, 10 de febrero de 2018
Crítica de “15:17 Tren a París”
-Una gran escena no hace una gran película. Quizás habría sido mejor un cortometraje.
-Estamos ante uno de los peores guiones con los que ha trabajado Eastwood.
No alcanzo a recordar si alguna vez en mi vida un proyecto dirigido por Clint Eastwood me había llamado tan poco la atención, a priori, como este último. No por ello iba a faltar a una cita que agradezco más o menos cada dos años, y que algún día ya no tendré la suerte de esperar. Son 87 primaveras las que lleva cumplidas el maestro, 63 dedicadas al séptimo arte. Y aunque muchos piensen que debe abandonar, otros tenemos claro que nuestro Clint no puede existir fuera de sus pasiones, y que queremos continuar escuchando su suave melodía hasta el final. Actualmente el californiano continúa con sus películas de héroes americanos, pero en esta ocasión ha querido cristalizar la transparencia de los elementos con la historia que le ayudan a narrar. Por esta razón el cineasta ha decidido que sean los auténticos héroes los que se interpreten a si mismos. Una decisión polémica que interesa mucho más que el propio argumento del filme, y que ha resultado ser uno de los escasos aciertos de la propuesta.