lunes, 26 de septiembre de 2016

Crítica de “Captain Fantastic”

-Una película con espíritu enérgico y moderadamente subversivo, buenas ideas y un gran corazón. Viggo Mortensen no podría estar mejor.

-Extraordinaria tragicomedia con moraleja, puede que finalmente sea más mansa de lo debido, pero también es preciosa de principio a fin.

Cuando el actor Matt Ross debutó en la dirección de largometrajes, lo hizo con “28 Hotel Rooms”, un drama romántico que probablemente ninguno de los lectores o escritores de este articulo conozcan. Pero su segunda película seguro que sí la conocéis y os ha llamado la atención. Porque promete regalarnos una de las familias más divertidas y extrañas del panorama cinematográfico al mismo tiempo que busca alegrarnos ahora que el verano toca a su fin y entra el otoño en nuestras vidas. El director también escribe el guión de la propuesta, y para darle vida a esas palabras, consigue un reparto de altura. Viggo Mortensen interpreta a Ben, progenitor, líder de la familia y protagonista mayoritario de la propuesta, seguido por un increíble elenco de secundarios: Missi Pyle, Kathryn Hahn, George MacKay, Steve Zahn, Hannah Horton, Trin Miller y Frank Langella -entre otros-. Ahora sin alargarme demasiado, paso directamente a hablaros de una de las apuestas más atractivas de la temporada otoñal y de lo que llevamos de año.

domingo, 25 de septiembre de 2016

Crítica de “Los siete magníficos” (2016)

-Cuando el western moderno en formato homenaje se junta con el cine de acción comercial y pierde la esencia en un banquete de tiros tan cansino como horriblemente planeado y grabado.

-El convincente reparto y un inicio muy sólido, me dan esperanza. Una pena que el filme sea tan plano, estúpido, trivial y se tome la violencia como un elemento estilístico y baladí.

Sturges quiso homenajear a Kurosawa con un “remake” que mudaba los elementos del cine de samuráis al western, un género que gustaba mucho al maestro. Sin ser excepcional, “Los siete magníficos” sí que contenía elementos raros en su ejecución. Y digo raros porque había detalles especiales en el ritmo y en la forma con la que Sturges retrató a sus personajes y la acción. Aunque al final, aparte de ciertas escenas y de los diálogos de McQueen; la cinta pasó a la historia por la magnífica banda sonora de Elmer Bernstein. Pero las cosas no podían quedar así, porque ahora todo tiene que tener una nueva versión. Así que el irregular Antoine Fuqua, antes de dirigir el remake de “Scarface”, se enfrenta al remake del remake de “Los siete Samuráis”. El western se encuentra hora en una forma envidiable, no hay demasiadas apuestas, pero casi todas las que se estrenan resultan excelentes, y cada vez empieza a apostarse más por el género (para alegría de muchos). Algunos no dudan en denominar el fenómeno, a pesar de su lozanía, “la nueva edad de oro”. Además frente a muchos otros géneros, actualmente este no presenta excesivos remakes. “True Grit” de los Coen y “El tren de las 3:10” de James Mangold fueron de los pocos ejemplos y además salieron muy bien. Ahora es Fuqua quien trae de vuelta el género, para ello cuenta con dos guionistas muy diferentes: Richard Wenk (“Homefront”, “The Equalizer”) y Nic Pizzolatto (“True Detective”, “The Killing”). En el reparto el liderazgo lo lleva el serio Denzel Washington en lugar del serio Yul Brynner, y le acompañan nombres de la talla de: Chris Pratt, Ethan Hawke, Vincent D'Onofrio, Byung-hun Lee, Manuel García-Rulfo, Haley Bennett y Peter Sarsgaard -entre otros-. Decidamos pues si Fuqua ha conseguido llevarnos de vuelta al salvaje oeste.

viernes, 23 de septiembre de 2016

Crítica de "Bridget Jones Baby"

-Bridget Jones vuelve con energía y cierta nostalgia, pero su excesivo amor por el patetismo y su inconcebible nivel de absurdo sumados a la vulgaridad e innecesariedad del conjunto; convierten esta secuela en un ridículo circo de los horrores.

-El reparto funciona tan bien como siempre y el regreso de Sharon Maguire es un soplo de aire fresco. No sé si reírme o llorar de vergüenza, decido hacer ambas cosas.

La primera entrega de esta trilogía (que adaptaba el best-seller de Helen Fielding), fue una agradable sorpresa para el género, que nos descubrió a un personaje encantador y honesto con el que podíamos empatizar como seres humanos. La película fue todo un éxito y lo de comer helado tras las rupturas se convirtió en un delicioso cliché. Tres años después y para intentar repetir el éxito de la original, Universal le pasaría el testigo a la directora Beeban Kidron (“El hombre que vino del mar”). La secuela no sólo no estuvo al nivel de la primera, sino que fue un desastre de la cabeza a los pies, convirtiendo al encantador personaje en una parodia de si mismo que resultaba insultante para las mujeres. Ahora, doce años después, la saga regresa con la directora que lo empezó todo, a los mandos. Sharon Maguire es esa directora, y junto a Renée Zellweger y Colin Firth; representan los nombres importantes de esta secuela. Repiten algunos secundarios como: James Callis, Celia Imrie, Sally Phillips o Jim Broadbent. En cuanto al guión tenemos a tres encargados. Helen Fielding regresa para adaptar de nuevo a su personaje, le acompañan la magnífica Emma Thompson y el espantoso Dan Mazer. Ahora que Bridget ha vuelto a los cines y a nuestras vidas, voy a deciros si debéis estar felices, comer helado, o pasar directamente al whiskey doble.

jueves, 22 de septiembre de 2016

Crítica de “The Free State of Jones”

-McConaughey lleva las riendas de una película de buenas intenciones pero tibios resultados. Gary Ross no está a la altura de las circunstancias.

-Película fría, errática y aburrida. Entre la biografía solemne y complaciente, la dispersa y superficial lección de historia y los destellos de épica con toque western.

Tengo un amigo que lleva mucho tiempo esperando este proyecto de McConaughey, y creo sinceramente que con la sucesión de conversaciones me ha transmitido su ansia por verlo. La verdad es que no pintaba nada mal. La vuelta de Gary Ross a la dirección tras la sobrevalorada “Los juegos del hambre”, era la oportunidad de descubrir si aún podía brindarnos películas de interés o su descanso tras “Seabiscuit” le arrebató de alguna forma su habilidad tras las cámaras. Además el guión para la historia real de Leonard Hartman, está escrito por el propio Ross. Por último tenemos a McConaughey a los mandos de la historia, seguido de unos competentes secundarios, por ejemplo: Gugu Mbatha-Raw, Keri Russell, Mahershala Ali, Brad Carter y Sean Bridgers. Pese a todo esto, lo más atractivo de esta propuesta no reside en el equipo que la lleva a cabo, sino en la propia historia. Gary Ross recupera -o desentierra- una parte fascinante y relevante de la historia americana. Ahora toca examinar su forma de retratarla.

viernes, 16 de septiembre de 2016

Crítica de “Blood Father”

-Mel Gibson ha vuelto. Y por eso esta película es como un regreso a los buenos tiempos del género. Diversión bruta, cinética y socarrona para toda la familia, o casi.

-El guión vive de los mínimos elementos para estructurar la narración. No busquen aristas, matices, ni nada por el estilo. Aunque la dirección de Richet sí tiene un par de cosas que decir.

Jean-François Richet es un director difícil de catalogar. No hay muchos nexos de unión entre sus diferentes obras, tampoco un criterio estilístico, temas interrelacionados, etc. Tras su díptico “Mesrine” y una etapa de barbecho personal, en 2015 estrenó “Una semana en Córcega”. Un remake de la comedia francesa “Un moment d'égarement” (1977) de Claude Berri. Era una película entretenida, jugueteaba con temas interesantes -sin llegar a desarrollarlos- y tenía un reparto sensacional (destacando una brillante Lola Le Lann); pero no parecía el sitio de Richet. Ahora vuelve a cambiar de género sin conexión alguna con el resto de su filmografía. En esta ocasión vira hacia el cine de acción puro, duro y enfurecido. Pudiera parecer que hay cierta semejanza con “Asalto al distrito 13”, el remake de la película de Carpenter, pero la verdad es que no. La historia de esta película, la de un padre exconvicto que debe ayudar a su hija matando a un montón de criminales, definitivamente no es nada nuevo. Precisamente porque esta película parece un viaje hacia atrás, hacia la nostalgia. La historia proviene de una novela del guionista Peter Craig (“Sinsajo”), que se encarga de co-escribir el guión de la cinta junto a Andrea Berloff (“Straight Outta Compton”). Pero lo que de verdad hace esta cinta interesante, es su protagonista. El regreso de Mel Gibson al género que le encumbró como actor, es una alegría para muchos. Y además le acompañan unos secundarios de lujo, como por ejemplo: Erin Moriarty, Elisabeth Röhm, William H. Macy, Diego Luna y Michael Parks -entre otros-. Ahora veamos lo que este thriller de acción frenética puede aportar a los espectadores, y si nuestro querido Gibson consigue redimirse tras una buena ración de acción.

jueves, 15 de septiembre de 2016

Crítica de “Tarde para la ira”

-Un debut fascinante del actor Raúl Arévalo. Thriller seco, áspero y rústico; dirigido con pericia e interpretado con talento a raudales.

-Ritmo sosegado, bastante movimiento de cámara, primeros planos y parquedad textual definen esta ópera prima llena de rabia contenida.

El thriller hace tiempo que se ha convertido en el género predominante en nuestro país. Y como la práctica hace al maestro, hemos aprendido a crear unos thrillers artesanales e impecables que más allá de buscar competir con Hollywood, muestran una personalidad propia y nacional. Muchos consideraban a Raúl Arévalo un actor de comedia sin más registro (a pesar de su variado currículum), la gente debió cambiar de opinión al ver su trabajo en la exitosa “La isla mínima” de Alberto Rodríguez, que casualmente estrena dentro de poco su nuevo e interesante thriller, “El hombre de las mil caras”. Pero a lo que voy, el actor que se descubrió como una cara ideal para el género, se ha pasado a la dirección precisamente con un thriller, y va a demostrar finalmente que también tiene mano para el género cuando está tras las cámaras. También debuta como guionista junto a David Pulido, con un guión que escribieron hace ocho años. En el reparto Arévalo ha trabajado con algunos buenos amigos. El protagonismo se lo lleva Antonio de la Torre al que acompañan: Luis Callejo, Ruth Díaz, Manolo Solo, Alicia Rubio y Raúl Jiménez -entre otros-. “Tarde para la ira” ha sido rodada en Super 16, que junto a la fotografía oscura de Arnau Valls Colomer (“Toro”), consigue una imagen áspera, con mucho grano y perfecta para la historia que cuenta y los ambientes sociales que retrata. El problema, que en nuestro país ya casi no se revela, por lo que el equipo tuvo que llevar la película a un laboratorio de Rumanía. Ahora que está de vuelta en nuestro país y estrenada en cartelera, veamos si merece la pena pasar por nuestro cine más cercano.

miércoles, 14 de septiembre de 2016

Crítica de “Juego de armas”

-Todd Phillips regresa a la comedia para narrar un drama sobre el negocio de las armas. El problema es que su película está diluida, es esquemática, no es tan graciosa ni tan punzante como debería y no parece contar nada.

-Hill y Teller consiguen que la película parezca mejor de lo que es. El primero es sencillamente lo mejor de la película, y construye un personaje muy interesante.

Después de la trilogía “Resacón” y esa intermedia “Salidos de Cuentas”, Todd Phillips podía salir por muchos lados. De las cuatro películas mencionadas, la primera “Resacón” la considero una inteligente, gamberra y excelente comedia. El resto son copias feas, estridentes, horribles y sin gracia. Por eso le agradecemos al señor Phillips que nos ofrezca un nuevo proyecto diferente y más maduro. “War Dogs” (mejor título que el de “Juego de Armas” en nuestro país) nos ofrece una historia más o menos basada en hechos reales, de dos veinteañeros que se forraron a costa de contratos armamentísticos con el ejército de Estados Unidos en plena guerra de Afganistán. El guión corre a cargo de Todd Phillips y Jason Smilovic (“El caso Slevin”) y el reparto protagonizado por Jonah Hill y Milles Teller, lo completan -entre otros-: Ana de Armas, Bradley Cooper, Jeff Pierre, Shaun Toub y Barry Livingston. Si queréis saber cuantos escalones ha subido Phillips en Hollywood, gracias a su nueva comedia, seguid leyendo.

sábado, 10 de septiembre de 2016

Crítica de “Café Society”

-Como cada año, tenemos cita obligada con un cineasta único. Y aunque haya dejado atrás su época dorada, sus películas siguen siendo un lugar en el que reír, desear, apenarse, reflexionar y quedar hechizado por unas sensaciones y sentimientos que parecen de otro mundo anterior; no siempre más fácil, pero sí más romántico.

-Una historia sobre los golpes de la vida y el amor, sobre la madurez y los desencantos; ensalzada por un trío de actores maravillosos y el extraordinario trabajo de Vittorio Storaro.

Como pasa con otros maestros entrados en años, mucha gente cree que el octogenario Woody Allen debería haberse retirado hace muchos años, lo que viene a significar hace muchas películas. Como viene a ser habitual yo creo lo contrario. No niego que en los últimos años Allen sólo me ha cautivado con un par de películas, e incluso algunas de ellas lo hicieron a raíz de una nostalgia provocada por la entrañable revisión de temas habituales en la obra del cineasta. Pero no podría soportar haberme perdido “Blue Jasmine” y tampoco algunas escenas monumentales de la infravalorada “Irrational Man”. Así pues, este año vuelvo al cine -algo tarde- a ver lo útimo de Woody Allen, que en esta ocasión nos lleva hasta la meca del cine en la época que más le ha influido como cineasta: los luminosos y caóticos años 30. La banda sonora vuelve a estar plagada de jazz y no podría estar mejor seleccionada, en la fotografía está un maestro de la talla de Vittorio Storaro (“Ultimo tango a Parigi”) y en cuanto al reparto, lo forman un buen número de nombres atractivos entre los que se encuentran: Jesse Eisenberg, Kristen Stewart, Steve Carell, Blake Lively, Parker Posey y Corey Stoll. Ahora paso directamente a contaros qué nos ha traído en este horrible verano el genio neoyorquino.

martes, 6 de septiembre de 2016

Crítica de “Ben-Hur” (2016)

-Normalmente cuando el tiempo te da la razón esbozas una sonrisa orgullosa. Pero este remake es tan malo que uno sufre cuando se da cuenta de que casi sabía lo malo que podía llegar a ser. Es aún peor.

-Un filme perfectamente horrible que define todo lo malo del cine actual. Vacío de ideas, ingenio, habilidad, artesanía, pasión, etc. Ben-Hur logra el podio en mi lista de peores películas del año, dios castigue a quien la saque de ahí.

Muchos ya habéis leído al menos media docena de críticas negativas hacia este remake, y no creo que estéis ansiosos por leer de nuevo lo mismo que en los artículos anteriores. Pero bueno, sin extenderme mucho y para aquellos que todavía necesitan alguna opinión más; voy a hacer el esfuerzo de dedicarle más tiempo de mi vida a semejante despropósito. Llevo desde que se anuncio este proyecto siendo un tipo de personaje que suelo criticar, uno de esos “haters” que odian algo antes de verlo. Pero creo haber fundamentado mi odio sin fundamento en elementos fundamentados. Procedo a explicarme. Vale que los guionistas no eran malos ni mucho menos. Ahí está John Ridley (12 Years a Slave) que no tengo ni idea de que ha hecho en esta ocasión porque el guion es infame; y Keith R. Clarke (The Way Bach). Tampoco rechacé la elección de Marco Beltrami como compositor ocupando el puesto de Miklós Rózsa. Ni que decir tiene que el trabajo de Beltrami es un chiste si alguien intenta compararlo con la maravillosa composición de Rózsa para el filme de William Wyler. Pero había dos apartados que me parecían una broma de mal gusto. En primer lugar el reparto. No sé qué puede hacer que contrates a Morgan Freeman y le pongas rastas para que se parezca a Whoopi Goldberg, desde luego no acepto que Jack Huston (aún sabiendo que es un actor muy competente) sea el sustituto de la infravalorada y extraordinaria interpretación de Charlton Heston y en cuanto al tercero en discordia; quizás que el papel que hace casi 6 décadas interpretara Stephen Boyd fuera ahora para Toby Kebbel era la menos mala de las tres decisiones. Pero casualmente Kebbel está peor que nunca. Y si no acepto estas decisiones de casting, mucho menos acepto que la batuta la tenga el pésimo Timur Bekmambetov (Guardianes del día, Abraham Lincoln cazavampiros). Una decisión que tampoco entiendo por más que llevo un año pensando. Si quieres llevar a las salas el más que innecesario remake de una de las mejores películas que ha dado el séptimo arte y que tras 57 años de su estreno sigue sin haber envejecido lo más mínimo, al menos hazlo con seriedad y calidad. Pero no, Paramount ha querido ayudar a que este verano sea el peor en mucho tiempo y me dispongo a explicaros porque “Ben-Hur” (2016) es una de esas pocas películas especiales, capaces de recibir un cero de nota.

lunes, 5 de septiembre de 2016

Crítica de “Criminal”

-Kevin Costner sale airoso de una propuesta en la que todo falla estrepitosamente. Es larga, tediosa, tonta, fea e irritante.

-El reparto está desperdiciado, la dirección es mala, el montaje peor y el guión para quemarlo y tirar las cenizas a un volcán en erupción.

Esta nueva apuesta del thriller scifi no pintaba nada mal en un principio. Ariel Vromen había dirigido The Iceman, un sombrío y muy interesante thriller mafioso que había gustado mucho a la crítica. Era el momento de que el director se asegurara una posición de interés para futuros proyectos. Además el guión corre a cargo de Douglas Cook y David Weisberg, guionistas de Double Jeopardy y la que ostenta el título de mejor película de Michael Bay, The Rock (para algunos ex-aequo con Pain & Gain). Y el reparto, protagonizado por un renacido Kevin Costner, tiene una lista de secundarios impresionante entre los que se encuentran: Gary Oldman, Tommy Lee Jones, Jordi Molla, Ryan Reynolds, Alice Eve, Gal Gadot y Michael Pitt. Con todo este equipo, una premisa bastante interesante y un trailer llamativo; todo apuntaba a que este decepcionante verano aún tenía alguna cosa que decir.

sábado, 3 de septiembre de 2016

Crítica de “No respires”

-”Don't Breathe” es un thriller de invasiones domésticas muy poco corriente. Te mantendrá agarrado al asiento incluso cuando la lógica no tiene cabida y la sustancia es inexistente.

-El guión es mínimo. Aquí manda la forma, el movimiento, la tensión y el golpe de efecto. Stephen Lang -como siempre- fantástico.

Fede Álvarez y el guionista Rodo Sayagues unicamente han trabajado juntos a los largo de sus respectivas filmografías. Tienen tres películas a sus espaldas antes de hacer esta última. Dos cortometrajes y un largometraje. Me interesa hablar del largometraje. Pues estos dos señores, fueron los culpables de mancillar un clásico y/o referente del terror, la comedia de terror y la serie B. Su remake de “Evil Dead” es una de las películas más idiotas, irritantes e innecesarias de los últimos años. Por alguna razón la crítica cayó rendida a sus pies mientras yo luchaba por no vomitar por toda la sala de cine a la espera de que el mundo fuera exorcizado. Cuando supe que Raimi y Campbell habían dicho que era mejor que la suya, me dieron ganas de dejar de ver cine. No lo hice, y aquí estoy escribiendo estas líneas. Porque el nuevo trabajo de los responsables de aquella película terrible, no sólo pinta muy bien, sino que vuelve a tener el respaldo total de crítica y público. Así Fede Álvarez vuelve al puesto de director y co-escribe el guión junto a Rodo Sayagues, la música corre a cargo de otro habitual colaborador del director, el español Roque Baños (“Las trece rosas”, “El maquinista”, “Celda 211”) y en el reparto Stephen Lang comparte protagonismo con un joven reparto formado por: Dylan Minnette, Jane Levy y Daniel Zovatto. Vamos a ver como el va al director uruguayo en su segundo intento.