Otro año más llega una de esas fechas marcadas en el calendario de cualquier cinéfilo que se precie, hablo por supuesto de la gala de los premios de la Academia, conocidos en todo el mundo como “Los Oscar”. Para lo que no lo sepan, estos premios son concedidos por la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas en reconocimiento de los profesionales de la industria cinematográfica. Para muchos no es más que politiqueo barato, algo en lo que este cronista está totalmente de acuerdo, aunque siempre es divertido comentar en directo la ceremonia, que se suele caracterizar por su elegancia y algún gag memorable, dependiendo del presentador. Tras dos años compartiendo fantásticos momentos con la punzante Ellen DeGeneres, en esta ocasión será el legendario Neil Patrick Harris el que ejercerá como presentador. Un prestidigitador nato que es especialista en llevar a nuestras casas el espectáculo y las sonrisas. Harris ya ejerció de presentador en cuatro ocasiones para los premios Tony y abrió la ceremonia de los Oscar en 2010. Seguro que nos espera una entretenidísima gala de chistes, modelitos alternativos y premios de todo tipo, id afilando vuestras garras, porque habrá mucho que criticar en esta nueva entrega de los Oscar.
sábado, 21 de febrero de 2015
sábado, 13 de septiembre de 2014
Crítica de “Boyhood”
-Linklater lo ha vuelto a hacer: una película tan sincera como hermosa, un álbum de fotos lleno de momentos fascinantes y una de las mejores películas de la última década.
-Cine sin precedentes, un logro apasionante que desde la más pura de las sencilleces se convierte en una obra única y realmente especial; Boyhood renueva tus creencias en el poder del cine.
Richard Linklater es uno de los mejores cineastas del momento, tras finalizar el pasado año su magistral trilogía con una de las mejores películas románticas que he se han hecho jamás regresa a los cines con un proyecto muy personal, insólito y desde luego fascinante. 12 años de duro trabajo le han traído hasta aquí, tan solo 39 días de rodaje y una conmovedora historia que empieza en la niñez para llevarnos a través de primeras veces, descubrimientos, desilusiones, controversias y todo tipo de momentos aparentemente normales pero que conforman una obra de dimensiones catedralicias. Al mismo tiempo una película sencilla y un logro colosal, que pasa casi por un documental a nivel narrativo y que en 166 minutos logra nuestra total atención, sin ningún tipo de trampa ni truco efectista, es ingeniosa, dramática, franca, trascendental, revive muchos de nuestros recuerdos en un viaje como no hay otro, es sin duda una película sin imperfecciones, una obra maestra destinada a perdurar.